Proyecto de interiorismo comercial Molins Design: Fases y duración
Hoy te explicamos las 6 fases que componen un trabajo de diseño comercial, desvelando al completo la duración y las pautas a seguir para ejecutarlos correctamente.


¿Qué es el interiorismo comercial?
El interiorismo comercial es el proceso de diseñar y crear ambientes atractivos y funcionales en espacios destinados a la actividad comercial, como oficinas, tiendas, restaurantes, hoteles y otros establecimientos similares.
Esta disciplina del interiorismo va más allá de la simple decoración, ya que implica el estudio y la planificación minuciosa de cada elemento del entorno. Desde la distribución del espacio y la selección de colores, hasta la elección de mobiliario, iluminación, materiales y detalles decorativos.
La importancia del interiorismo comercial radica en su capacidad para mejorar la experiencia del cliente dentro de un espacio. Al diseñar un entorno acogedor, estéticamente agradable y funcional, se crea un ambiente propicio para atraer y retener a la clientela. De hecho, el diseño interior cuidadosamente pensado y ejecutado puede influir en el estado de ánimo de las personas, generando sensaciones positivas y estimulando los cinco sentidos. Todo ello, puede hacer que el usuario se vea influenciado por una marca a la que, finalmente, le rinde lealtad por la visión y los valores que representa.
Interiorismo y decoración en espacios comerciales
Al crear espacios estéticamente agradables, funcionales y adaptados a las necesidades de un público objetivo, se puede establecer una conexión emocional con los clientes. Además de aumentar su satisfacción, potenciar las ventas y construir una imagen de marca sólida.
En oficinas, el interiorismo comercial puede mejorar la productividad y el bienestar de los empleados. Para ello, se suele recurrir a la creación de entornos de trabajo ergonómicos, funcionales y atractivos.
En tiendas y restaurantes, el interiorismo comercial también desempeña un papel crucial en la creación de atmósferas únicas y memorables. Aquí entran en juego aspectos como la disposición de los productos, la iluminación adecuada, la elección de materiales y la ambientación sonora.
1. Toma de contacto
Cualquier proyecto de interiorismo comercial comienza con una primera toma de contacto. Para ello, nuestro equipo os pedirá feedback sobre qué necesidades tenéis, cómo queréis que sea el guion a desarrollar y dónde va a realizarse la intervención.
Con toda esta información como background, nos lanzamos a analizar toda la documentación que se tenga sobre el espacio. Es importante conocer cuál es la actividad comercial que rige el espacio, por si fuera necesario realizar algún cambio de licencia antes de empezar la reforma. Además, será necesario tener alguna documentación gráfica, ya sean fotografías o vídeos, del espacio a intervenir. De ahí obtendremos una primera impresión, que utilizaremos como punto de partida.


2. Estimación económica
Tras esta primera fase de recopilación de información, pasamos a realizar la valoración económica del proyecto. Y, en este sentido, os proporcionaremos dos documentos.
Por un lado, la valoración económica de los honorarios del proyecto, es decir, la definición conceptual, estética y distributiva del proyecto. Por otro lado, os prepararemos una valoración económica estimada de la ejecución de la reforma que vamos a realizar.
En definitiva, dos documentos en los que tendréis toda la información necesaria para tomar la decisión de proceder y empezar con el proyecto de interiorismo.


3. Inicio de proyecto
Una vez aceptado el presupuesto del proyecto, ya abordamos con todo nuestro equipo el arranque del proyecto. Para eso, necesitamos conocer más en profundidad el espacio. Normalmente nos desplazamos al lugar de la intervención y hacemos un escaneo en tres dimensiones de todas las estancias. En el caso que sea un local de un tamaño más reducido, se puede hacer esta medición de manera manual.
Más en detalle y, en relación a la empresa en cuestión, tenemos que hacer un ejercicio de inmersión para conocer el negocio en sí. Antes de la fase de ejecución debemos entender quién va a ser el usuario final de ese espacio y cuál va a ser su interacción con el espacio a intervenir. Por eso, en esta fase tres es importante también la comunicación con los departamentos de marketing y dirección de arte, para poder trasladar y plasmar la imagen corporativa al proyecto. Algo que resulta fundamental para que el espacio también respete las características principales de la marca, tanto a nivel visual como estético.


La fase cuatro es el período más importante, el momento en el que nuestro equipo se pondría manos a la obra. La primera temática a abordar sería la propuesta de distribución en planta del espacio, es decir, qué recorridos se van a crear dentro de este espacio o local comercial.
Una vez la distribución en planta nos funcione, pasaremos a definir los alzados. Aquí se hace una definición en detalle de todas las estancias a intervenir, incluyendo una descripción detallada del mobiliario requerido.
Una vez, tenemos la distribución en planta y los alzados definidos, se realiza una propuesta de instalaciones y de iluminación técnica y decorativa. En el caso de los espacios comerciales, la propuesta de iluminación es clave para ayudarnos a destacar ciertos elementos o espacios con una clara intencionalidad.
La última parte de esta fase cuatro es la elección de materiales que van a intervenir en la propuesta. Digamos que sería el plato fuerte, en el que vamos a proponeros todos los materiales que van a estar presentes en cada zona o espacios en los que vamos a intervenir. Estos materiales, siempre serán elegidos teniendo en cuenta las especificaciones técnicas y requerimientos que un espacio contract precisa.


5. Renderización del espacio
En la fase cinco llega el renderizado del espacio, es decir, la visualización en tres dimensiones del local o comercio a ejecutar. En un proyecto de interiorismo comercial, esta parte es fundamental para crear una visualización previa a la ejecución de lo que es el espacio físico a nivel material.
Debemos tener en cuenta que, en muchas ocasiones, estos proyectos hay que presentarlos a diferentes equipos como dirección, departamento comercial, financiero, etc. Es decir, a todos los interlocutores que van a intervenir en la toma de decisiones en un proyecto de estas características. Con lo cual, es una herramienta muy buena para poner encima de la mesa todos los puntos trabajados y contrastar si lo pactado cumple con los requisitos y expectativas por parte de todos los equipos.


¡Hacemos realidad el diseño de locales comerciales!
La duración de un proyecto de interiorismo comercial va a ir en función de la complejidad del proyecto. Pero, como norma general, nuestros profesionales en interiorismo y decoración tardan entre uno y dos meses en reformas o intervenciones de este tipo.
¿Quieres compartir con nosotros tu proyecto de interiorismo? Envíanos un email o llámanos ahora para explicarnos tus necesidades. En el estudio Molins Design estaremos encantados de convertirnos en vuestra guía de diseño para espacios confortables y únicos.